El partido entre Liverpool y Real Madrid popr una nueva fecha de la Champions, que terminó 2-0, fue un espectáculo lleno de emociones. Hubo buenos goles, penales fallados por ambos equipos y momentos vibrantes en cada tramo. Sin embargo, el claro dominador del encuentro fue el equipo inglés, que mereció plenamente quedarse con los tres puntos. Una vez más, Liverpool demostró que está listo para competir por la “Orejona”, y su impecable desempeño en la fase de grupos lo respalda: ha ganado los cinco partidos disputados y está a un paso de clasificarse directamente a los octavos de final de la UEFA Champions League.
La primera mitad tuvo pocas ocasiones claras de gol. Las dos más peligrosas estuvieron en los pies de Darwin Núñez. Primero, a los 22 minutos, intentó definir frente a un desesperado Thibaut Courtois, quien logró ganar el duelo. Poco después, tras un pase magistral de Alexis Mac Allister, el uruguayo conectó de cabeza, pero el balón pasó cerca del poste.
El segundo tiempo trajo consigo toda la acción. Apenas iniciado el complemento, Courtois volvió a lucirse con una atajada impresionante frente a un cabezazo a quemarropa de Conor Bradley. Sin embargo, en la siguiente jugada, Alexis Mac Allister combinó con un compañero, se internó en el área y definió con precisión contra un poste, superando finalmente al arquero belga.
Con el marcador en contra, el equipo de Ancelotti tuvo que arriesgar más, lo que dio a Liverpool la oportunidad de ampliar su ventaja. Pero el destino tenía otros planes. Lucas Vázquez fue derribado en el área, y el árbitro Letexier señaló penal. Kylian Mbappé tomó la responsabilidad, pero su disparo fue atajado por Kelleher.
La emoción no terminó ahí. Poco después, Liverpool tuvo su propia chance desde los 12 pasos. Mohamed Salah asumió el reto, pero su remate se fue desviado, dejando el marcador 1-0.
El partido seguía abierto, hasta que Liverpool aseguró la victoria con un cabezazo contundente de Cody Gakpo tras un centro perfecto. Ese 2-0 definitivo selló el triunfo, dejando a un Real Madrid incapaz de reaccionar para intentar al menos empatar.
Con este resultado, Liverpool mantiene un rendimiento perfecto en la fase de grupos, con cinco victorias en cinco partidos, consolidándose como uno de los favoritos al título. Por otro lado, el Real Madrid atraviesa un inicio complicado, acumulando apenas seis puntos y ocupando la posición 23, lo que lo deja por ahora en zona de ronda preliminar de clasificación.